En Resumen
- Deren Akyeam-Pong se declaró culpable de nueve cargos por secuestrar y torturar a Aiden Pleterski en diciembre de 2022, quien fue retenido tres días y obligado a solicitar $3 millones para sus captores.
- El consultor David Sehyeon Baek señaló que el exceso de información en redes sociales "prácticamente pinta un objetivo en la espalda" cuando traders muestran ganancias o compras de lujo con criptomonedas.
- El investigador Jameson Lopp había predicho que 2025 marcaría "un máximo histórico" para ataques relacionados con cripto, superando ya los 52 casos registrados en todo el mundo.
Un hombre admitió haber secuestrado y torturado al autoproclamado "Rey de las Criptomonedas" de Ontario, Aiden Pleterski, en un violento rapto ocurrido en diciembre de 2022 que se ha convertido en emblemático del creciente peligro que enfrentan los poseedores de criptomonedas por ataques físicos.
El martes, Deren Akyeam-Pong se declaró culpable de nueve cargos, incluyendo secuestro, asalto y delitos con armas de fuego en el Tribunal Superior de Ontario en Toronto, según un reporte de CBC.
La declaración desencadenó un aplazamiento inmediato del juicio para sus dos coacusados, sin que se haya programado aún una nueva fecha de juicio.
"Desde mi perspectiva, el exceso de información juega un papel enorme: prácticamente pinta un objetivo en la espalda de las personas", señaló a Decrypt el consultor en cibercriminalidad David Sehyeon Baek. "Cuando los traders o inversionistas muestran capturas de pantalla de grandes ganancias o publican fotos de autos nuevos comprados con criptomonedas, sin saberlo proporcionan inteligencia de código abierto para los criminales".
Documentos judiciales revelaron que Pleterski había gastado casi $16 millones de fondos de inversionistas en jets privados, vacaciones y autos de lujo, incluyendo Ferraris, Lamborghinis y McLarens, un estilo de vida que hacía alarde abiertamente.
A principios de diciembre de 2022, Pleterski fue secuestrado y retenido durante tres días, durante los cuales llamó a su arrendador solicitando $3 millones para sus captores antes de ser liberado bajo amenaza de recaudar el dinero y mantener silencio.
Entre quienes esperan juicio se encuentra Akil Heywood, un inversionista que perdió dinero en el esquema de Pleterski; enfrenta tres cargos de secuestro y dos de extorsión, y mantiene su inocencia.
El coacusado Alfredo Paladino enfrenta cargos similares de secuestro, extorsión, armas de fuego y asalto. Los cargos contra ambos hombres aún no han sido probados en la corte.
Quiebra forzada
El secuestro ocurrió meses después de que los inversionistas forzaran a Pleterski a declararse en bancarrota en agosto de 2022 mientras intentaban recuperar más de $40 millones que le habían entregado para inversiones en criptomonedas y divisas extranjeras.
El propio Pleterski enfrenta cargos de fraude y lavado de dinero relacionados con fondos de inversionistas, con un juicio programado para octubre de 2026.
Baek señaló el secuestro de Pleterski como uno de varios casos de alto perfil que demuestran cómo "estas migajas se traducen en peligro real", citando "el caso de Bali que involucró a una pareja china cuyas publicaciones precedieron sus muertes, y un influencer estadounidense que fue extorsionado poco después de publicar capturas de pantalla de su billetera".
"Compartir demasiado no solo presume riqueza, también delinea hábitos y vulnerabilidades. Para un atacante motivado, eso es una hoja de ruta", agregó.
En noviembre de 2024, el CEO de WonderFi Technologies, Dean Skurka, fue secuestrado en medio de un aumento de ataques relacionados con criptomonedas en Canadá, con secuestradores exigiendo un rescate de $1 millón CAD que fue pagado electrónicamente antes de que fuera encontrado ileso en Centennial Park, Etobicoke.
El mes pasado, Keyron Moore recibió 13 años de prisión por un secuestro en el área de Toronto en 2022 que involucró tortura, agresión sexual y una demanda de $1 millón en Bitcoin de una víctima identificada como A.T., quien fue secuestrada afuera de una plaza en Thornhill y confinada en un garaje en Barrie.
El investigador de seguridad Jameson Lopp había predicho anteriormente que 2025 marcaría "un máximo histórico" para tales ataques, superando ya los 52 casos en todo el mundo.