La Fusión de Ethereum a Proof of Stake Podría Ser En Agosto Si Todo Sale Bien

No te hagas demasiadas ilusiones, pero el paso de Ethereum a un sistema proof of stake podría estar a la vuelta de la esquina.

El desarrollador de Ethereum, Preston Van Loon, dijo hoy en un panel de la conferencia Permissionless que hay un impulso para finalizar el cambio en los próximos tres meses.

"Por lo que sabemos, si todo va según lo previsto, tiene sentido que sea en agosto", dijo Van Loon. "Si no tenemos que mover [la bomba de dificultad], hagámoslo tan pronto como podamos".

Justin Drake, de la Fundación Ethereum, también en el panel, señaló que hay un "fuerte deseo de hacer que esto suceda antes de [la] bomba de dificultad en agosto", según un tweet del co-anfitrión del evento Bankless.

Van Loon y Drake se referían a un evento llamado La Fusión. Es cuando la actual blockchain de Ethereum se unirá a la cadena de balizas proof-of-stake. Ese movimiento cambiará la red de la minería -donde la gente ejecuta potentes ordenadores para tener la oportunidad de ganar ETH- a la de staking, en la que los titulares de Ethereum pueden depositar su ETH a cambio de recompensas.

Agosto no es una fecha aleatoria. A principios de mayo, los desarrolladores del núcleo de Ethereum decidieron no actualizar la red para retrasar la llamada "bomba de dificultad", que pronto comenzará a degradar la red. Se trata de un elemento codificado dentro de la blockchain que ralentiza intencionadamente la red. La intención era tanto animar a los desarrolladores a seguir adelante con la prueba de trabajo como dificultar que los mineros se quedaran atrás en la cadena de prueba de trabajo tras el cambio. Este mes, los desarrolladores del núcleo decidieron no desviar su atención de La Fusión, que actualmente se encuentra en fase de pruebas. Su finalización anularía la necesidad de desactivar la bomba de dificultad.

Aunque tanto la prueba de trabajo como la prueba de participación ayudan a mantener la red segura y descentralizada, la prueba de participación tiene varias ventajas añadidas. Además de utilizar mucha menos energía, el consenso de la prueba de participación también debería facilitaría la entrada de más jugadores dentro del crecimiento de la red, lo que permitiría una mayor descentralización y aumentaría la seguridad.

Pero la verdadera razón por la que muchos esperan la fusión es porque se espera que reduzca la emisión de ETH en un 90%. Menos ETH en circulación significa, por supuesto, menos oferta y mayor demanda, lo que debería hacer subir el precio de la moneda. A día de hoy, 1 ETH se cotiza a 2.000 dólares, según datos de CoinMarketCap. Los más optimistas de los alcistas de Ethereum creen que La Fusión podría llevar el precio del activo de nuevo por encima de su máximo histórico de 4.891 dólares, establecido en noviembre de 2021.

La prueba de participación ha tardado mucho en llegar. Técnicamente ha estado en vivo desde diciembre de 2020, con la finalización de la Fase 0 de lo que entonces se conocía como "Ethereum 2.0", un conjunto de actualizaciones para escalar la red y, al mismo tiempo, hacerla más segura.

Pero eso era sólo la cadena de balizas, una red de pruebas con la que no se puede hacer nada realmente. Hasta ahora, la gente sólo ha podido bloquear su ETH en ella, con la promesa de futuros pagos. La fusión de la cadena existente con la cadena de balizas alterará esta situación.

No es la última gran actualización prevista para Ethereum. Un componente importante de la estrategia "Ethereum 2.0" es la fragmentación o sharding, una forma de dividir la red en múltiples cadenas. Como dice la Fundación Ethereum: "Con las cadenas fragmentadas, los validadores sólo necesitan almacenar/ejecutar los datos del fragmento que están validando, no de toda la red (como ocurre hoy). Esto acelera las cosas y reduce drásticamente los requisitos de hardware".

A los usuarios de Ethereum no les importaría que La Fusión se acelerara también.